Windows 11.

En Redmond han dejado bien en claro que Windows 10, su sistema operativo estrella, llegaría a su fin en octubre de 2025. 

Frente a este panorama, miles de usuarios están siendo obligados a buscar alternativas para seguir utilizando sus equipos. 

Como sabrán, una de las opciones ha sido instalar Windows 11, incluso en aquellos equipos que no cumplen con los requisitos mínimos del sistema. Pero, ¿será realmente seguro y recomendable realizar esta acción?

Windows 11: más allá de las restricciones

Desde su llegada al mercado hace ya unos años, Windows 11 ha cautivado a millones de usuarios con su diseño renovado y nuevas funcionalidades. 

Aún así, los requisitos técnicos exigentes han dejado afuera a muchos equipos.

A pesar de ello, los usuarios han encontrado métodos para saltarse estas restricciones y disfrutar de las ventajas de este sistema operativo en equipos más antiguos.

La experiencia de un usuario real

Hace poco, un usuario de Ars Technica decidió compartir su experiencia de tres años utilizando Windows 11 en equipos como el “Dell Optiplex 3010” y el “Lenovo ThinkPad X230”. 

Según esta persona, el rendimiento en tareas cotidianas y ligeras fue más que aceptable, incluso para aplicaciones como edición de texto y tratamiento de imágenes.

Los retos de la instalación y actualización

Sabiendo que la experiencia general puede ser positiva, existen algunos desafíos clave que los usuarios deben tener en cuenta:

Actualizaciones: La mayoría de los ordenadores que no cumplen con los requisitos oficiales no reciben las actualizaciones de forma automática. 

¿Qué implica esto?  que cada usuario debe realizar las actualizaciones de forma manual, lo que puede resultar complejo para aquellos que no tienen experiencia. 

Compatibilidad: Si bien el rendimiento general puede ser bueno, la realidad es que suele surgir problemas de compatibilidad con ciertos hardware o software.

Riesgos de seguridad: Debes saber que al instalar Windows 11 en equipos no compatibles, podrías comprometer la seguridad del sistema, ya que es posible que no se reciban todas las actualizaciones de seguridad necesarias.

¿Vale la pena el riesgo?

La realidad es que instalar Windows 11 en un equipo obsoleto puede ser una forma efectiva de prolongar su vida útil, más si el dispositivo se utiliza para tareas básicas.

Aún así, es fundamental sopesar los pros y los contras antes de tomar una decisión. Por ende, habrá que tener presente estos consejos básicos: 

  • Siempre que pretendas realizar cualquier cambio en el sistema, deberás hacer una copia de seguridad de todos los datos importantes como respaldo.
  • Antes de proceder con la instalación, se recomienda investigar a fondo y buscar tutoriales detallados.
  • Es posible que se encuentren problemas durante la instalación o el uso del sistema operativo.
El futuro de Windows 11

Es posible que en el futuro Microsoft relaje los requisitos de Windows 11, permitiendo que más equipos puedan ejecutar este sistema operativo.

Sin embargo, hasta el momento, la decisión de instalar Windows 11 en un equipo no compatible debe tomarse de forma consciente y asumiendo los riesgos.

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(S.M.C)

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